Que la piel cambia a lo largo de tu ciclo menstrual es algo innegable. Así que… ¿Por qué no modificas tu rutina en función de sus necesidades?
Piel y ciclo menstrual, depende de cómo te afecte el síndrome premenstrual, serás de las afortunadas a las que sólo les salen unos granitos puntuales los días previos a la regla, o de lo contrario, serás de las que sufren de un cambio hormonal notable.
En estos casos la piel y el cabello se engrasan notablemente debido a un aumento de sebo en la piel y el cuero cabelludo entre otros síntomas.
Sin embargo, seguro que no te has parado a pensar en qué necesita tu piel durante estos días y lo correcto, sería hacerlo.
“las características de la piel van cambiando en función de la fase del ciclo menstrual en la que nos encontremos y, por tanto, es necesario ir adaptando los productos cosméticos a esa necesidades”
La piel no necesita lo mismo al ovular que en la fase premenstrual.
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Fase folicular (desde la menstruación hasta la ovulación) existen niveles muy altos de estrógenos que mantienen nuestra piel hidratada y luminosa. En esta fase es cuando nos encontramos más guapas y necesitamos menos cuidados.
En la Fase lútea (desde la ovulación hasta la regla) los niveles de estrógenos disminuyen y aparece la progesterona, que aumenta la actividad de las glándulas sebáceas. Esto provoca que la piel esté más grasa y de lugar a granitos especialmente en los día previos a la regla.
Durante la menstruación los niveles de estrógenos y testosterona caen en picado y la piel suele estar más seca, sensible e irritable. Este descenso hace que la piel se vea además más mate.
Como ves, piel y ciclo menstrual están directamente relacionados y la clave es ir observando tu piel para ir adaptando tus cosméticos a ella.
Interesante, ¿verdad? Pues puedes seguir aprendiendo curiosidades beauty en nuestro blog todos los meses.
Hola! Ufff ambas están muy ligadas y muchas lo padecemos! ojalá pronto podamos contrar hasta tal punto que un cosa no afecte tan negativamente a la piel, sobre todo por los granitos. Gracias por compartirlo!
Gracias a ti Kath 😉